¿Cómo era la zona de Cabo Roig en el siglo XVI?
¿por qué se construyó la Torre Vigía de Cabo Roig? Los piratas berberiscos hacían sus incursiones por la noche, principalmente en zonas de costa rocosa, con pequeñas calas, ensenadas o cabos. Las zonas de orografía similar a la de Cabo Roig eran sus favoritas pues les permitía esconderse fácilmente y esconder a los pequeños barcos que utilizaban. ¿por qué se construyó la Torre Vigía de Cabo Roig?
Para prevenir la zona de los ataques de piratas berberiscos. Con la Reconquista de Granada, en 1492, se autorizó a los ciudadanos musulmanes a continuar viviendo en la península Ibérica. Se les denominaba Mudéjares. Principalmente vivían en Andalucía, Murcia y Levante.
Sin embargo, la convivencia entre vencedores y vencidos no fue fácil, a lo que se unían las incursiones de los piratas bereberes (algunos ciudadanos mudéjares ayudaban a los piratas en sus incursiones), y la guerra entre España, como defensora del cristianismo y el Imperio Otomano. Todo ello dificultó mucho la vida en común y las relaciones no mejoraron.
En 1502, se obligó a los ciudadanos mudéjares a abandonar la península o a convertirse al cristianismo. Los que se convirtieron y se quedaron fueron llamados Moriscos. El intento por integrar a esta población con la cristiana tampoco prosperó, pues pasados los años los ciudadanos musulmanes no habían cambiado sus costumbres ni el trato hacia ellos había mejorado por parte de los cristianos.
Felipe III decretó en 1609 la expulsión de los ciudadanos moriscos. Se expulsaron cerca de 300.000 personas, lo que produjo un importante drama a los afectados y un impacto negativo en la actividad económica de la época.
¿Cómo afectó todo esto al área de Cabo Roig La Zenia?
Muchos de los expulsados al norte de África se unieron a los piratas bereberes, bien por venganza o por necesidad, y los fortalecieron pues conocían el terreno y las costas españolas, así como su idioma.
Los piratas partían desde sus bases del norte de África, principalmente desde Argel, y hacían incursiones en las costas españolas de Andalucía, Murcia, Alicante y resto de la Comunidad Valenciana, así como en Baleares.
Estaban apoyados financieramente por los enemigos de esa época de España, principalmente el Imperio Otomano.
En sus incursiones los piratas saqueaban todo a su paso, quemaban y destruían. Hacían prisionera a la población y les trasladaban al norte de África donde se vendían como esclavos o canjeaban por rescates.
Hacían sus incursiones por la noche, principalmente en zonas de costa rocosa, pequeñas calas, ensenadas o cabos. Las zonas de orografía similar a la de Cabo Roig eran sus favoritas pues les permitía esconderse fácilmente y esconder a los pequeños barcos que utilizaban, que no podían ocultar en las grandes playas abiertas.
¿Cómo defenderse de estos ataques?
En tiempos de Felipe II, cuando el imperio español se extendía por toda América del Sur, central, casi toda América del Norte, parte de la costa africana, Flandes, Italia y Filipinas, se tuvo que desarrollar todo un sistema de defensa de las costas del Mar Mediterráneo de la misma España.
Se llegó incluso a plantear la construcción de una gigantesca muralla que recorriera la costa mediterránea española. Esta idea se desechó por su excesivo coste.
Los pasos que finalmente se tomaron fueron:
1º.– Operación avanzadilla: Se ocuparon de forma permanente diversas plazas en el norte de África, como Orán y Bujía. Era la primera línea de defensa para interceptar barcos y recopilar información sobre la actividad pirata.
2º.- Castillos: Se reforzó la seguridad de las poblaciones costeras más importantes o de las poblaciones de interior cercanas al litoral. Se construyeron o reforzaron antiguos castillos. Muchos de ellos se convirtieron en auténticos monumentos. En la zona de Alicante destaca la zona de los Castillos de Vinalopó, a la que dedicamos una «entrada» y que aconsejamos como visita de un día desde Cabo Roig.
3º.- Lógicamente no se desarrollaron más poblaciones cercanas a la costa, pues serían más difíciles de defender de los ataques desde el mar. Esto explica como en zonas como en Cabo Roig y extensible al resto de Comunidad Valenciana y Murcia, gran parte de las principales poblaciones de cada comarca con litoral no se encontraban pegadas al mar.
En el caso de Cabo Roig y Torrevieja, la villa de mayor población estaba en el interior, Orihuela.
Esta misma pauta se observa en otras regiones costeras del mediterráneo español. Los desarrollos junto a la costa se realizaron más recientemente, y en la mayor parte de los casos con vistas al desarrollo turístico de las playas.
4º.- Torres de vigía: Se edificó un sistema de defensa en todo el litoral, compuesto por torres de vigilancia. Eran torres localizadas en lugares estratégicos por su visibilidad del mar y desde el interior: principalmente en cabos, ensenadas, zonas rocosas, pequeñas calas.
Se edificaron estas torres en toda la costa. Todo Levante, Murcia, Baleares….
Sí, la torre de Cabo Roig, y la de Torre de la Horadada forman parte de ese sistema de defensa. Es un monumento que puede resultar poco llamativo, pero que tiene detrás una impresionante historia.
¿Cómo se construían estas torres de vigía?
Las torres contenían tierra poco compacta entre sus muros para absorber los cañonazos. Estaban compuestas por una parte interior donde vivía el alcaide y apenas dos o tres soldados, unas escaleras de caracol que subían a la terraza donde había uno o dos cañones, y donde se realizaban las señales al resto de torres.
¿Cómo funcionaban?
Durante el día el aviso de ataque era hacer humo, y por la noche era hacer fuego. Inmediatamente las torres más cercanas replicaban el aviso, y en las poblaciones estas señales se transformaban en campanadas de las Iglesias y otras medidas.
Entonces en las poblaciones las agrupaciones de campesinos se reunían y armaban y eran las que defendían el ataque de los piratas bereberes.
Estos ataques, se debilitaron mucho con la caída del imperio Otomano en el siglo XVIII, aunque perduraron hasta el siglo XIX.
Desde entonces las torres de vigía perdieron su misión, y lamentablemente muchas de ellas fueron desapareciendo. La Torre del Pinatar desapareció totalmente. Otras muchas fueron reconvertidas en faros. Afortunadamente otras fueron declaradas monumentos, rehabilitadas y en ocasiones sirven de museo.
Por ello, considero un privilegio que permanezca la Torre de Cabo Roig como monumento rehabilitado, y debo de reconocer que desde que conozco la historia que motiva su existencia miro la Torre de Cabo Roig con otros ojos, más interés y si cabe con más respeto.